7.26.2008

Algunos se creen que los mató el tiempo o las decisiones
otros se creen que simplemente es el tiempo el que les dio la vida, que las decisiones los mataron.
Para esos hay un pasaje sólo de ida, y con suerte, de satisfacción garantizada.
Para los demás nos queda un poco más. Saber, por lo menos, que podemos llorar a escondidas o en público cuando la máquina se rompa y nos digan que tenemos que seguir a pie.