"Todavía, hay dos tipos que
siguen hablando por ahí"
Qué tentador puede verse un adoquín.
Todavía. Todavía.
Hay dos tipos, siguen hablando por ahí.
Suenan copas y cuchillos. Son los crines de partir.
Perdóname, suena terrible,
pero siempre te querré.
Perdóname, suena sencillo
pero estallé.
Monocromática sonrisa
es el viento desde el sur.
Mira. Mira.
Que violento puede ser un adoquín al partir.